En estos días he escuchado muy frecuentemente una falacia que dice más o menos lo siguiente: que gracias al buen manejo de la crisis económica, así como al comportamiento responsable del gobierno mexicano en el 2009, nuestro país no está pasando por una crisis como la de Grecia u otros países europeos.
Esta falacia la ha propalado el gobierno mexicano y la han repetido numerosos analistas, intelectuales y opinadores profesionales. Muchos la han aceptado como verdadera y, en particular, señalan que México hizo bien en no incurrir en un mayor déficit fiscal el año pasado.
Estos argumentos, sin embargo, están equivocados y tienen al menos dos problemas fundamentales:
1) Confunden conceptos básicos como flujos y acervos. El problema de Grecia y de otros países europeos no es sólo el enorme tamaño de su déficit fiscal actual (un flujo), sino el de su gran deuda pública (acervo) combinado con sus expectativas de grandes déficits futuros (flujos).
2) No entiende que el problema fundamental de algunas economías europeas es estructural y no coyuntural. El problema de esas economías es su baja competitividad en relación a sus socios comerciales, lo cual los ha llevado a incurrir en enormes déficits en cuenta corriente que tarde o temprano tenían que ajustarse (de 6.9% en el caso de Grecia y de hasta 8.9% en el caso de Portugal en el 2009). Este problema, combinado con el tema de una moneda común que les impide usar una devaluación como mecanismo de ajuste, establece limitantes muy importantes a sus respuestas de política. Esto los llevará a tener que hacer un fuerte ajuste fiscal (contracción de gasto y aumento de impuestos), lo que la su vez producirá una caída en el producto y el empleo y, al menos durante un cierto tiempo, a una mayor deuda pública expresada como porcentaje del PIB.
Para poder ver con mayor claridad las diferencias entre la economía de México y las economías europeas, el siguiente gráfico muestra la deuda pública de algunos países seleccionados. Como se puede ver, la diferencia entre México y algunos países europeos no sólo es de nivel (menor en México) sino de tendencia (estable en México versus creciente en países europeos). Nótese, además, que las diferencias no provienen únicamente de la coyuntura del 2009 como pretenden hacernos creer quienes propagan estas versiones, sino que, al menos, provienen desde principios de este siglo.
Esta falacia la ha propalado el gobierno mexicano y la han repetido numerosos analistas, intelectuales y opinadores profesionales. Muchos la han aceptado como verdadera y, en particular, señalan que México hizo bien en no incurrir en un mayor déficit fiscal el año pasado.
Estos argumentos, sin embargo, están equivocados y tienen al menos dos problemas fundamentales:
1) Confunden conceptos básicos como flujos y acervos. El problema de Grecia y de otros países europeos no es sólo el enorme tamaño de su déficit fiscal actual (un flujo), sino el de su gran deuda pública (acervo) combinado con sus expectativas de grandes déficits futuros (flujos).
2) No entiende que el problema fundamental de algunas economías europeas es estructural y no coyuntural. El problema de esas economías es su baja competitividad en relación a sus socios comerciales, lo cual los ha llevado a incurrir en enormes déficits en cuenta corriente que tarde o temprano tenían que ajustarse (de 6.9% en el caso de Grecia y de hasta 8.9% en el caso de Portugal en el 2009). Este problema, combinado con el tema de una moneda común que les impide usar una devaluación como mecanismo de ajuste, establece limitantes muy importantes a sus respuestas de política. Esto los llevará a tener que hacer un fuerte ajuste fiscal (contracción de gasto y aumento de impuestos), lo que la su vez producirá una caída en el producto y el empleo y, al menos durante un cierto tiempo, a una mayor deuda pública expresada como porcentaje del PIB.
Para poder ver con mayor claridad las diferencias entre la economía de México y las economías europeas, el siguiente gráfico muestra la deuda pública de algunos países seleccionados. Como se puede ver, la diferencia entre México y algunos países europeos no sólo es de nivel (menor en México) sino de tendencia (estable en México versus creciente en países europeos). Nótese, además, que las diferencias no provienen únicamente de la coyuntura del 2009 como pretenden hacernos creer quienes propagan estas versiones, sino que, al menos, provienen desde principios de este siglo.
Así pues, es una falacia decir que la caída del producto del 2009 y la respuesta a la crisis económica nos salvaron de una situación peor: México no es Grecia, simplemente porque México no estaba tan endeudado como Grecia. México tampoco está como España o Portugal, porque nuestro país ha tenido la capacidad de ajustarse frente a choques externos a través de movimientos en el tipo de cambio y porque México no estaba en una situación inicial de desequilibrio externo como estas economías. ¡Basta de falacias!
Update: Como les decía, el gobierno sigue propalando esta absurda versión. Vean esta nota de hoy como ejemplo de ello.
Update: Como les decía, el gobierno sigue propalando esta absurda versión. Vean esta nota de hoy como ejemplo de ello.
8 comments:
Dr. Esquivel
Que bueno que toca este tema, yo soy economista y la comparación que se hace en los medios entre la crisis griega y lo que vivió México el año pasado no hace mas que poner en evidencia a los pesimos comunicadores que tenemos en México, que pena escuchar hablar a personas supuestamente bien preparadas como Carlos Elizondo Mayer Serra, Luis Rubio y un sin fin de comunicadores desinformados atribuyendo la crisis de Grecia, España etc, a la irresponsabilidad y al populismo, alzando a nuestros "siempre responsables y conocedores funcionarios".
Saludos desde Europa, simple pero muy bueno. Este tipo de opiniones y comentarios son los que se demandan de los economistas pensantes del país, sobre todo en tiempos donde los periodistas económicos (que no cuentan con formación teórica sólida) suelen divulgar cosas sobre la situación económica comiendo bastantes errores. A esto hay que añadir que últimamente se atreven a realizar análisis y diagnósticos económicos con errores.
A la gente en México que opina que "al menos no estamos como Grecia" yo le diria una cosa: con independencia de esta crisis, el promedio de gente en Grecia (Portugal o España) vive, desgraciadamente para nosotros, mucho mejor que el Mexicano promedio. Asi que ya quisieramos estar como ellos!!
Qué es entonces lo que sugiere dr esquivel? o qué sería más acertado decir?
Que estaríamos en la misma situación actual independientemente de lo que hubiera hecho el gobierno para enfrentar la crisis? o que estamos en una situación mucho peor de lo que estaríamos si se hubieran tomado otras medidas, como por ejemplo una expansión fiscal, y que por lo tanto Calderón no tiene nada que presumir? o, ya en un extremo, que cualquier otra política para enfrentar la crisis hubiera sido mejor que la que se siguió?
sludos
El gobierno de Calderón siempre tratando de engañarnos. Esta ocasión con el miedo, para así justificar su pesima política económica, que no ha provocado más que estancamiento económico...
Para el que dijo que en Grecia "viven mejor" que en México que se de una vueltecita por el mediterraneo, Grecia es un país donde a un Primer Ministro le encontraron el carro robado de David Beckham. Y si hay un país parecido a México en su cultura del que no tranza no avanza, ese es Grecia.
Estoy de acuerdo en que la comparación no es buena,porque aunque las culturas son similares las economías entre México y Grecia no lo son, lo único cierto es que ese país esta en pésima situación económica producto de su corrupción extrema y simplemente entregó su autonomía financiera a la Unión Europea.
Dr. ¿cuándo viene a la FE UASLP?
ojalá y pronto
atte: E I
Justo antes de leer tu post había leído esto en http://bit.ly/dhBdyQ:
"[E]l LEAP/E2020 querría retorcer el pescuezo a la fábula monetaria que circula a lo largo de los medios de comunicación económicos y repetida a coro por la inmensa mayoría de los economistas: el hecho de poder devaluar su moneda a «voluntad» no es en absoluto ni un factor de independencia, ni un instrumento constructivo de salida de crisis; muy al contrario. Por un lado, estas devaluaciones son impuestas por los «mercados», es decir por las fuerzas exteriores al país y cuya última preocupación es el interés de los pueblo afectados por la devaluación; por otra parte, estas devaluaciones conducen inevitablemente a un empobrecimiento del país y a su dependencia creciente enfrente a sus socios con divisas más fuertes que, en un sistema de libre circulación de los capitales, pueden comprar las «joyas de familia» del país con poco gasto."
En este sentido me llaman la atención 2 cosas: la primera es que en una situación de crisis sistémica global como la actual de nada sirve devaluar, porque esa receta se va a aplicar de forma más o menos generalizada anulando las "ventajas" competitivas obtenidas; la segunda es que quien tiene el mayor problema de deuda a nivel mundial es Estados Unidos: no sólo por el tamaño de la misma con respecto a su PIB, sino porque ésta va a seguir creciendo en los próximos años y no existe en el mundo suficiente dinero para financiarla. ¿Por qué no lo incluiste en tu comparación?
Saludos
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